Desde estos medios les avisamos de forma oficial y definitiva que la Visita Pastoral de nuestro Arzobispo Don Francisco a nuestra Parroquia de San Martín de Porres, será D.m. los próximos días 28, 29 y 30 de noviembre.

Don Francisco pretende con esta Visita alentar el entusiasmo de las Comunidades Parroquiales que nos encontramos inmersas en la «Nueva Evangelización».

El Programa ha quedado del siguiente modo:

Viernes 28 de Noviembre:   10:00    Visita a una Clase de Religión en el Colegio “Antonio Machado”. Saludo a los profesores.  11:45    Encuentro con los profesores y alumnos del Colegio “Virgen de la Rosa”.  18:30    Administración del Sacramento de la Confirmación a un grupo de jóvenes de la Parroquia.

Sábado 29 de Noviembre:   17:00    Reunión con el Consejo de Economía de la Parroquia.   17:30    Reunión con el Consejo de Pastoral de la Parroquia.   18:00    Encuentro con los Movimientos, Asociaciones, Cofradía y Grupos Parroquiales en el Salón Parroquial.

Domingo 30 de Noviembre:  11:00    Encuentro con los niños, jóvenes, padres y catequistas en el Salón Parroquial.  12:30    Misa Estacional en la Parroquia.

Esperamos que esta Visita Pastoral produzca grandes frutos en nuestra Parroquia y en sus feligreses.

Don Francisco, ¡¡bienvenido a nuestra Parroquia!!

Te damos gracias, Señor, por estar siempre presente en nuestras vidas, por llamarnos, por amor, a ser miembros de tu Iglesia, por sentirte nuestro Maestro, Pastor y Amigo.

Hoy sabemos que estás a la puerta y nos llamas, que vienes, una vez más, a visitarnos; esta vez en la persona del que Tú mismo elegiste para ocupar tu lugar en esta porción de tu Pueblo.

Te pedimos por estos días de encuentro de nuestra comunidad con nuestro Arzobispo Francisco: que sean días de gracia y nos renueves con la fuerza del Espíritu.

Que, como Pastor, nos reúnas en una verdadera comunidad fraterna y nos transformes interiormente, para que podamos compartir con nuestros hermanos la alegría del Evangelio.

Encomendamos esta Visita Pastoral, a María nuestra Madre; porque, al darnos a Jesús, nos ha regalado el único gozo que nadie nos podrá arrebatar:

Santa María, “causa de nuestra alegría”. Ruega por nosotros.