Puede parecer un título muy elevado y teológico, pero no lo es. Así nos lo dijo Jesús en el Evangelio: «El que pone la mano en el arado y vuelve la vista atrás no puede seguirme». Nosotros hemos puesto nuestras manos en las suyas y estamos muy felices.

La razón es que este pasado sábado día 17 de octubre comenzó su andadura un año más el Grupo Parroquial de Infancia «Junior», con renovada ilusión, nuevas dinámicas, nuevos retos y nuevas propuestas. Como bien saben, el G.P.I. «Junior» nació en nuestra Parroquia de San Martín de Porres el curso pasado con el objetivo de comprometer más en la vida de fe a los niños y jóvenes, y que desde el ámbito parroquial descubrieran que hay gente de su misma edad que también tiene la gran ilusión de seguir a Jesús y ser cristianos en el mundo de hoy. Un fin que cumplimos con creces.

La dinámica que seguimos este último día fue darnos cuenta de que Dios ha creado toda la tierra para nuestro bien; y ha puesto todos los seres para nuestro bien. El bien más grande es el ser humano que vive sobre ella y, aunque sea en distintos continentes, es receptor de un mensaje salvador: el mensaje del amor de Dios misericordioso. También cada cristiano participa de esa misión de Jesús y de la Iglesia. Por eso, los niños plasmaron la huella de sus manos en un gran cartel, como para decir «cuenta conmigo» , «aquí me tienes».

Quisiéramos agradecer desde estas líneas el empeño de la familias por participar con sus hijos en este gran proyecto, la ilusión de los animadores siempre dispuestos a ser testigos de algo grande y la oración de toda la Parroquia que ve en ello un futuro más juvenil y comprometido. Nos vemos el día 7 de noviembre.

SILVIA